Supongamos que cogemos una rata y la ponemos en una jaula con dos suelos diferentes. Ambos están electrificados. El experimento comienza dando corriente a una de las partes. Se pulsa un interruptor que va soltando electricidad poco a poco. En cuanto la electricidad sube lo suficiente... ¡chas! La ratita salta para el otro lado y se libra de la descarga. Si apretamos el otro interruptor en unos momentos la rata vuelve a saltar. A medida que repetimos esto, nuestra querida ratita aprende que en cuanto escucha el click del interruptor más le conviene saltar o en breve le van a freír sus pezuñitas. Así, podemos ver como simplemente dando a los interruptores hemos conseguido que una rata dé saltos a nuestro antojo, sin ni siquiera gastar un euro en electricidad.
Pero... ¿qué pasa si cuando la rata salta al otro lado también está electrificado? Vaya, esto no se lo esperaba... resulta que se toma la molestia de saltar y no se libra del dolor... Su primera intención es volver a saltar. Lo hace varias veces, hasta que descubre que no tiene sentido saltar, puesto que vaya donde vaya, haga lo que haga, recibe la descarga. Por tanto, se queda quieta, como diciendo... “¿pa qué voy a saltar? Ya que me voy a llevar la descarga, aquí me queo”.
Esto es la indefensión aprendida. Y se considera que puede ser base de procesos de depresión.
Supongamos que una comparsa piensa que la calidad es algo importante y que se tiene en cuenta en el concurso oficial. Ha aprendido tras años de afición y escucha atenta de los más grandes de la fiesta que los grupos que triunfan normalmente son los que más calidad tienen. ¿Y qué es eso de la calidad? Bien... supongo que será...
MÚSICA. José Martínez, Antifaz de Oro y Persona de Oro, con todo lo posible por ganar a sus espaldas, y con la ilusión de un chiquillo, hace un pedazo de pasodoble, más melódico y suave que en otras ocasiones. Apuesta por la sencillez en la melodía para que el grupo la enriquezca con sus voces, un precioso pasodoble por mayores (¿quién es el inculto que dijo en Ondaluz que este pasodoble es triste?) con algunas partes sencillamente preciosas. A esto sumamos un cuplé chirigotero que hace reír sólo por la música, un estribillo que se puede considerar una joyita y un popurrí con ritmos originales y melodías para ser escuchadas al menos un par de veces, en el que Geni hace unas magníficas aportaciones.
LETRA. Sin falsas vanaglorias, yo creo que se puede decir que son letras bien escritas y que dicen cosas, con contenido para pararse un poquito a pensar... ¡ay!
TIPO. Coherente con la edad de quien lo lleva, una idea original y diferente al resto, sin caer en lo estrafalario, y enfocada más desde lo que se dice que desde cómo se viste y adorna.
GRUPO. Voces nuevas y caras nuevas, con alguna conocida y con prestigio, que conforman un grupo forjado a base de afinación y ensayo, con la maestría de un director que sabe mucho más de esto que otros que hasta lo duplican en edad. Un grupo que deja constancia de su buen gusto a la hora de interpretar, donde prima el valor del conjunto por encima de lo individual, aunque también se encuentran voces concretas maravillosas, que sin duda hacen y harán historia en el carnaval.
El concurso es la jaula. Un interruptor es el jurado diario, otro el jurado oficial. Y nosotros somos las ratas.
Da igual lo bien que saltemos, lo bien aprendido que lo tengamos, y la calidad que se demuestre. Un interruptor está conectado al otro, y se encienden ambos a la vez... Para dar una descarga conjunta a todo aquello que no interese y borrarlo de un plumazo.
Simplemente, ignoran que estás saltando. Ignoran lo bien o mal que lo haces... Simplemente, tienen otros intereses.
Tras esta situación absurda de quien sabe que lo ha puesto todo y que eso que ha puesto es bueno, y que no se le ha valorado por quien tenía que valorarse... Queda un vacío y una sensación de que no merece la pena participar en un concurso en el que de partida no te dejan hacer lo mínimo que se puede hacer en los concursos: concursar y competir en igualdad de condiciones. Te sientes indefenso ante aquello que no controlas ni entiendes. Estás, por tanto, en un proceso de... indefensión aprendida.
Fuente: http://www.comparsalosenviados.com"
Gracias Fran por tu artículo, creo que es digno de leer en cualquier web de carnaval