En nuestro carnaval cantado hoy ya no es habitual que grupos de hombres interpreten a mujeres. Sin embargo en los años ochenta, este recurso de transgresión que está en la esencia misma de la fiesta, fue uno de los más utilizados entre las murgas de aquellas época con los que nuestro carnaval cantado evolucionaba casi sin darse cuenta. Se trataba de mostrar formas no escenificadas hasta entonces por aquellas generación de malagueños que iniciaron la nueva andadura carnavalesca en 1979. Recordemos algunas murgas (total o en parte con personajes femeninos): Los Pitufos, Los Chiqui-Chocas, Las chicas del alirón, El majara y su aren, Las locas del can-can, Las mayorettes, Las locas del tablao; y un largo etcétera. Años ochenta en los que cabe referir también la destacada participación de grupos mixtos, y especialmente, de grupos femeninos, frente a la situación actual: Las Cocineras, La Zíngaras , Las Heroínas, Borrón y pinta nueva, Embrujo...
Definitivamente, aquella etapa supuso un gran banco de pruebas para los años que vendrían, y en el que los personajes y los mensajes carnavalescos se abordaban de una forma directa y pura, frente a la mayor experiencia actual, en la que el personaje ya no es un estereotipo solo para la risa, sino una consecuencia, una reflexión más completa.
No creo que sea casual que uno de nuestros mejores cómicos carnavalescos, Miguel Ángel Merchán, acompañado por salvador González y el resto de la murga; lograse el primer premio tomando como punto de partida la estética y los movimientos de piernas y brazos que el charlestón exige, y, con un cuaderno de coplas que, a la postre, resulta un ir y venir muy eficaz por las posibilidades del personaje desde el punto de vista de la comicidad y las penurias del murguista para interpretarlo adecuadamente ("Nos apuntamos a una academia, para bailar salsa y reguetón, solo aprendimos en estos seis meses, estas pamplinas de charlestón. Con las dos manos en las rodillas, el culito para arriba, apoyarse y dejarse caer, damos un saltito, estira las piernas; y media vuelta para empezar otra vez..., Tengo echa candela, de la nuca a los tobillos..."); todo muy orientado, como ya sucediera con la inolvidable murga de abuelitos Culo veo, Culo quiero; a una risa muy inteligente (basada en la diversión) que también sirve para intercalar otros mensajes que nos recuerdan el contexto que nos rodea, la actualidad: ("Quien vive en la Moncloa nos quiere arruinar, Zapatero, todo el mundo en el paro... Don Francisco de la Torre, ha hecho 1, ha hecho 2, hace hecho 3... ha hecho 20; déjate de tantos parkings, y acaba la obra del Metro, que te veo en el INEM..."). ¿El resultado? Mucho más que una murga de hombres interpretando un personaje femenino, una forma de hacer carnaval que está en el principio de los tiempos y en la pluralidad de la expresión humorística, porque esta murga es para ver y escuchar sus bromas, sus bailes, sus juegos de palabras, sus farsas y bufonadas, con las que el espectador recibe muchos mensajes sobre quién transmite este humor murguista, cómo lo hace, a quién va dirigido o se refieren las coplas, dónde, cuándo... siendo el resultado, principalmente, un estado de ánimo de gran valor carnavalesco. "Pasen, señores, pasen; que continúa la diversión, mira por donde pisas, vayas a caerte y des un reventón, para bailar este cuerpo, estas piernas, este arte hay que tener... sé que te pongo a cien... soy una mezcla entre shakira y Montserrat Caballé".
Y voy un poco más allá. La gran madurez de los grupos actuales frente a los de los primeros años ochenta, para abordar el hombre disfrazado de mujer, permitiría vislumbrar otros retos mayores, tales como que mi admirada comparsa de mujeres de dirige Miguel Ángel Mata, Aaron, realizase una parodia (desde la comparsa también es posible parodiar) sobre algún personaje masculino. Capacidad tienen tanto el grupo como el autor de abordar este proyecto.
SI QUIERES QUE YO TE CANTE, POS YO TE CANTO
SI QUIERES QUE YO TE BAILE, POS YO TE BAILO
SI QUIERES QUE YO TE LIMPIE,
TE HAGA LA CENA, CUIDE A TUS NIÑOS
Y QUE POR LA NOCHE HAGA EL EDREDONING
ESO TE VA A COSTAR
MONEY MONEY MONEY,
MONEY MONEY MONEY MONEY,
MONEY MONEY MUCHO MONEY...
Murga Los Big Mac del Charleton (Estribillo).