Pepe era como ese anciano venerable de la tribu al que siempre acudes porque sabes que tiene impepinablemente la razón incuestionable de la experiencia. Era el consejero, esa voz que nos ponía los pies en el suelo. Si había un evento siempre afloraba en la boca de alguno "tranquilos, que eso ya lo está tratando el tito Pepe". Se mantenía firme y sereno en los mejores y en los peores momentos. Nunca olvidaré la autoridad de su sonrisa al saludarme: "¿Gordo, qué?"…
Para viajar por el tiempo y sentir
Málaga y sus carnavales
basta con tener memoria,
la máquina sobra gracias a un don nadie.
Benditas primeras notas
las de aquella caja del 94.
Desde entonces cuando cantas,
latiendo gargantas, es tuyo el teatro.
Del Alameda al Cervantes,
los de caramelo ya se hicieron grandes
y son el espejo donde los copleros
hoy quieren mirarse.
La religión de empezar un pasodoble
con un “Viva Málaga, señores”
vayan de bromista, gato o seductores.
Campanazo el de aquel granuja de febrero
que nos enseñó que no hay que tener miedo
a los amaneceres que desde las calles te acercan al cielo.
Gran familia que lleva el disfraz siempre como bandera,
lucha y compromiso detrás de sus letras
mostrando valores y creando cantera.
Tan sólo vi la humildad en sus victorias
y a un gran caballero cuando hubo derrota.
Gracias por este viaje en el tiempo, gracias por traernos
veinte comparsas. Gracias Gallego.
Comparsa LA VIAJERA. 2015. Autores: Antonio José Lara Álvarez / José María González Muñoz
Introducción, por Sergio Lanzas.
101TV
Video de LA VIAJERA en este enlace