Que noche. Tuve que salir un poco antes pero ahí se quedó Pedro en el foso con su portátil. Hoy se le veía contento de que contaran con él para la retransmisión de Canal Sur Radio, el tio no para. Canal Sur Radio y CarnavaldeMalaga.com tienen dos nombres en común, Pepelu Ramos y David Delfín, a un servidor lo han invitado también alguna vez a asistir a la retrasmisión, tengo que darles las gracias siempre a ellos por las referencias constantes a nuestra página web. En el foso caras conocidas como las de Paco Rodríguez, Rengel, Antonio Jiménez, Juan Soto, Eduardo Nieto y un sinfín de estrellas a las que no puedo dejar de saludar. Hoy tuve que irme igual de rápido que llegué, pero en esta ocasión, me llevé una sensación diferente a la del año pasado, que ya saben que la primera impresión es la que cuenta.
La puerta de camerinos. Se había convertido en enemigo público número uno de algunos de los que intentamos cruzarla. Eso y el no encontrarme un seguridad encima nuestra para que no saltemos al foso, -pensarían que hay borregos- ya es un cambio notable.
Cuando llegue a la puerta de camerinos me quede fuera, al principio no me percaté pero la gente entraba y salía de forma organizada, sin necesidad de una señal de stop con forma de mario y yo por si las moscas me bajé a media escalera mientras miraba abajo impaciente. Que quieren que les diga, el frío que hacía era directamente proporcional a las ganas de ver a Pedro doblar la esquina.
"¡Nono que haces ahí? entra!" ese era Pedro detrás mía tras la puerta de camerinos, -aquí voy a decir que miré a ambos lados por si le había escuchao alguien, y hasta pense que no se refería a mí- ¿dentro? y yo lo miré extrañao, pero entramos sin más.
Le conté mi sensación y se quedó perplejo, le dije: "Pedro, no lo vas a entender porque ni yo lo entendía" No son las luces de la calle, y aunque Rafael insista en pasar página, es importante reflejar este cambio. Esa puerta hace bien en estar bien abierta, tengo la sensación de que nadie la va a cruzar sin permiso.
La guinda, una noche de agrupaciones estrella con las que disfrutamos, como las que brillan en el Teatro cuando te das la vuelta, y un firmamento de luces cae sobre tí.
La próxima te escribo desde camerinos.