Carmen Abenza es quizá uno de los profesionales de los medios de comunicación más populares y queridos en Málaga. Hace muchos años para una entrevista en Málaga Televisión me requirió con humildad que no la llamase periodista, que ella no lo era; que como mucho, artista... Comenzó en Radio Torcal a finales de los setenta, mientras cantaba flamenco por las peñas, mientras se convertía en una artista capaz de sintonizar con todo lo malagueño hasta triunfar fuera, lo que más se valora en Málaga o ganaba el Certamen de Malagueñas. A mediados de los ochenta, cuando la Cadena SER transmitía en una franja horaria, impensable hoy, el programa COPLAS DE MI SER por Carlos Herrera; Carmen le sustituyó un mes de agosto, y relató para todo el país (mientras cosía los volantes de su traje de flamenca para la feria de su ciudad) ese mundo de coplas que lleva acento andaluz y es capaz de expresar con grandeza y con su habla propia todos los mundos. Luego vendrían los años en el Patio de Carmen en Canal Sur, un programa que creó escuela y que aún no ha sido superado; un programa que le llevaría también a la televisión pública en numerosas ocasiones y veranos (Jacaranda, entre otros) y a entrevistar a Camarón de la Isla, un momento profesional que seguro retiene en su memoria de una mujer que, sobre todo, ha sabido explicar con palabras sencillas los sentimientos, no solo los propios, sino los de cualquiera de sus escuchantes. De ahí que exista tanta identificación entre lo que dice y quien está escuchándola al otro lado inmersos en las faenas del trabajo, la casa, el coche, o simplemente, por entretenimiento. Un don que logran muy pocos comunicadores en la radio o en la televisión.
Fue pregonera de nuestro carnaval el 16 de febrero de 1992, con uno de los textos más populares que se han ofrecido; quizá porque además de reivindicar la fiesta como popular y recorrer su Historia desde la antigüedad, se recreó en la Málaga de la II República, y dialogó con la ciudad moderna y su fiesta con la colaboración de la comparsa femenina de Lola Jiménez y sus hijos los hermanos Pastor... Y también fue pregonera del Carnaval de Cádiz el mismo año y también en Huelva (un logro imposible de superar por ningún otro andaluz o malagueño), en suma, el triunfo lejos de casa, lo que más valora en nuestra ciudad, como tantas veces ella se ha resignado... Durante los años ochenta y primeros noventa presentó aquellas semifinales y finales interminables en el Teatro Alameda, en la Sala Falla y en el Cervantes, cuando no había un duro y su amistad con Rafael Acejo salvaba todas las dificultades y, también, por cariño a una fiesta en la que ella creyó desde el principio. Un día, otros como yo, sintonizamos Canal Sur y El Patio de Carmen ya no estaba; meses después uno de sus oyentes, un autor de carnaval, escribió una copla como reconocimiento; el mismo que la fiesta le debe a una mujer que allí donde ha estado, allí donde ha tenido oportunidad de abrir un micrófono ha llevado el carnaval (el nuestro) consigo.
Esta semana y tras lograr que Luis Melero regresase a nuestra fiesta; me llamó un amigo para comentarme que me observaba muy nostálgico con el pasado de la fiesta. Le respondí que estaba en lo cierto, quizá porque hace años admitía con resignación que carnavaleros muy válidos fueran alejándose de la fiesta (decisión legítima por otra parte); y hoy sé que quien no mira al futuro mirando por el retrovisor del pasado y recuerda, acaba por repetir los mismos errores. En cualquier caso, con esta referencia que aquí publico pretendo al menos lograr que nuestra Carmen y nuestro carnaval figuren en google (donde no existe una sola referencia que les una) en el lugar que merecen.
Hoy te escribo Carmen
Estas cuatro letras
Como testimonio de mi gratitud,
Porque has demostrado
Querer a Málaga con locura
Sin importarte en manera alguna
Que esta ciudad no te viera nacer.
Pero, ten por seguro,
Que tu cariño,
Carmen, es justamente
Correspondido,
Por parte sobre todo
De las mujeres
A las que siempre
Les hiciste llevaderas
Las tareas del hogar.
Tu voz se quebró en el aire
Cantando por malagueñas, mujer,
Y entre aromas de azahares
Y el verde de los naranjos se fue,
¿dónde se fue? ¿dónde se fue?
Cada mañana
Se echa de menos
Esa alegría que fuiste impartiendo,
Las noto en mis vecinas
Que ninguna canta
Tendiendo la ropa.
Esta triste El Patio
Porque falta Carmen
¿quién pudo sacar
De dentro de la radio
Un cascabel de arte...?
¡Ay, ay; mi Carmen!.
Comparsa ASÍ ES LA VIDA, 1992. Autor: José Miguel Morales.
Foto de Carmen Abenza: los más de Málaga. Diario Sur.