Málaga cómo te quiero. La trayectoria del piropo local en nuestro carnaval cantado está repleta de altibajos, de tópicos repetidos y de aciertos... En los años ochenta y coincidiendo con la recuperación de la fiesta, casi era obligado que el primer pasodoble estuviera dedicado a enfatizar los valores locales: los barrios, el ser malagueño, las tradiciones... claro que, entonces, la ciudad vivía inmersa en defender su espacio de una forma muy decidida frente a la escasa repercusión mediática y los largos años en los que Málaga había sido únicamente sol y turismo, que no es poco; pero insuficiente para una ciudad que, además, tenía otros valores sociales y culturales que mostrar. De aquellos años, nos quedan sin embargo, un retahíla de pasodobles-piropos sencillos que no ahondaban en el porqué, sino que mostraron el corazón de lo que somos, y en esto ya se sabe que cada tierra tiene el suyo propio.
Con el tiempo este piropo fácil caerá en desuso. Quizá demasiados tópicos repetidos. Seguramente aquella etapa sirvió para comprender que la copla carnavalesca tenía otras posibilidades para la alabanza, y éstas fueron alojándose principalmente en los estribillos (de las comparsas, especialmente), y en los fragmentos de los popurrís; donde llegarían las mejores muestras de cómo retratar lo malagueño, de cómo contextualizarlo con el conjunto de las coplas. Y también en este largo proceso, las llamadas de atención, como aquel pasodoble de Juambe Cobos en Juan Sin Miedo (Se me va a tachar, aunque me da igual, de escribir lo mismo; que mi inspiración ya se terminó, y que me repito. Si te canto a ti, Málaga de mi alma, ¿dónde está el error?, si es que no oigo a nadie que te eche un piropo en una canción.); o los aciertos de Curro Salazar, o las cuartetas de David Santiago...
La convocatoria no es nueva. Antes estuvieron Las coplillas picassianas, y ahí continúan los premios a los mejores pasodobles a Málaga y a Andalucía... cosas de los concursos. Y este año: Comparte con Arte, con fines solidarios; y, Málaga cómo te quiero, premio a la mejor copla que incluya esta frase...
Hay un premio por decir, Málaga cómo te quiero; y pienso que los piropos, no se compran con dinero; pero cómo en realidad, tengo la suerte de cara; traigo la cuenta del banco no vaya ser por si a caso/ que por suerte lo ganara. (Murga El niño dios).
Reconozco que no soy muy partidario de este tipo de iniciativas, pero bien está que una agrupación pueda ingresar el importe de este premio y paliar lo que cuesta salir y más en estos tiempos; o que una entidad benéfica sume un ingreso por esta vía. Ahora bien, y las enseñanzas de los años están ahí, se trataría de obtener a cambio coplas que dejasen constancia de lo que está pasando, tanto desde el punto de vista solidario, como del amor a nuestra ciudad y provincia, tal vez con la oportunidad de referir no ya lo que todos sabemos, sino lo que aún no hemos descubierto. He ahí el reto.
Que nos sentimos un poquillo despreciaos, si ellos se piensan que ensayamos por dinero;no necesita nadie aquí los dos mil euros; para cantarte “Málaga, cómo te quiero”. (Comparsa Don Nadie).
Y mi canción no rinde pleitesía, ni se pone de rodillas ni al poder, ni la ambición, mi canción es para el pueblo y por el pueblo, y no paga privilegios ni al banquero ni al patrón, mi canción es de los estudiantes, que entre libros sueñan hacer un mundo mejor, mi canción siempre hablará de amor, y tus besos y abrazos serán su motor, cuando suena al compás que le marca tu corazón, mi canción es de la clase obrera, y cantando a su manera grita pan y libertad, mi canción solidaria y valiente, será de la gente que lleva una cruz, mi canción es de gente sencilla, como tú... (Comparsa LOS ARTÍSTAS).
Gracias por venir. Desde otros carnavales y con evidente generosidad, llegan decenas de agrupaciones desde otras provincias: Ay, Campo de Gibraltar, que diría mi admirado Juan José Téllez... Siempre he considerado que si el carnaval cantado tenía un sentido principal, éste es poder servir de altavoz para la expresión de los temas locales desde la parodia, la risa, la reflexión... Cosas mías, es verdad. Y que un autor de otra provincia llegue a Málaga es, no solo un privilegio, sino una oportunidad de escuchar sus coplas y sus inquietudes, compartir el lenguaje andaluz del carnaval cantado; y tal vez, conocer mejor su visión sobre lo que está pasando en su entorno más cercano, ya sea el Campo de Gibraltar, Córdoba y sus pueblos, Granada... o los grupos de nuestra provincia, a los que tal vez habría que animarles con la convocatoria de un premio que les animase a explicarnos esa visión del rincón de Andalucía que habitan, sus cosillas y sus gentes. Siempre será más interesante que los autores cuenten su mundo con las coplas, más enriquecedor; y al menos a mí, me gustaría saber cómo quieren ellos a su tierra y cómo podemos descubrirla desde todos los ángulos: risa, reflexión, crónica de la actualidad...
Aquí me tienes otra vez, brindando coplas al aire, un docente de la calle, que tiene a bien traer, coplillas de carnaval, proclamando la cordura, con un punto de locura, pa llegarte a conquistas... (Comparsa LA CALLESCUELA).
Yo soy la voz de la provincia que viene al teatro con un repertorio buscao en los diarios creyendo que así voy a dar el pelotazo. Soy el que solamente canta por ganar en las tablas de un concurso que se vale de su tierra, soy otro politicucho, que vende al pueblo a cualquier precio su discurso. (Comparsa LOS SUPERHOMBRES)
Recuerden, todas las coplas son ejemplares, las recoja o no este subjetivo escuchante tan atento a los temas locales. Que hablen las coplas en el Templo de las Coplas...
BUENOS DIAS SEÑOR ALCALDE, ¿QUÉ LE TRAE POR AQUÍ?
NO LE ESPERABA TAN PRONTO
MAS SABIENDO QUE USTED TIENE TOAS GANAS DE VIVIR.
COJA Y DESE MEDIA VUELTA, TIRE PA PEDREGALEJO
QUE YA TENDRÁ TIEMPO DE SOBRA PA ESTAR AQUÍ TO EL DIA SIN HACER NADA,
DEDIQUE UNOS AÑOS MÁS A DISFRUTAR DE LAS MAÑANAS
JUNTO A LA ORILLA DEL MAR
DE UNA MALAGA QUE LLORA SI NO ESTÁ EL ALCALDE DE SU DEMOCRACIA.
QUEDESE UN TIEMPO Y DE UN PASEO POR ESAS CALLES
ABANDONÁS DESDE QUE USTED LAS ARREGLARA
QUE COMO MEDICO QUE ES SABRÁ LLEVARLE LA SALUD QUE NECESITAN
TODAS NUESTRAS BARRIADAS.
Y VAYA AL CERVANTES QUE ALLÍ PODRÁ USTED DE NUEVO SENTIR
EL APLAUSO DE NUESTROS CARNAVALEROS
A LOS QUE LE DIO USTE UN HOGAR, UN TEATRO EN EL QUE CANTAR
TENIENDO PRESENTE QUE LA CULTURA ES DEL PUEBLO.
NO TENGA USTED PRISAS, DON PEDRO, POR LLEGAR AL CIELO
QUE DONDE USTED VIENE ES UN SITIO MAS BELLO
Y ESTÁ LLORANDO A GRITOS POR SU ALCALDE BUENO.
PERMITAME SEÑOR, YO LO MISMO QUE USTED,
TERMINÉ MI OBRA EN LA TIERRA
UNA MALAGA MÁS CULTA Y MÁS GRANDE FUE MI SUEÑO
Y AHORA LA DEJO EN MANOS DE LOS MALAGUEÑOS.
Comparsa LOS SUPERHOMBRES, 2015. Autor: Francisco Albarracín Benítez.
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-Nombre del alcalde que quiere que su ciudad se duche con una pistola
de agua.
- Jose Antonio Nieto Ballesteros
- Eeeeerroooor
- Mmmmm dame una pista
- Se gasta en luces muuucho más en feria y navidades que en
carnavales.
- Mmm no se, lo tengo en la punta de la lengua!
-Te queda poco tiempo, corre!!!
- Francisco de la Torre!
- Correcto!
Cuarteto Mamones. Autor: David Amaya Jiménez
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Permítanme que me adueñe unos segundos del silencio del teatro
De este aroma malagueño, que tanta magia nos ha dado
Déjame saborear y degustar tus camerinos
Déjame romperme el alma ofreciendo mis quejios
Que si el cuco se nos para, dará el tic tac estos latidos.
Permítanme cantar de nuevo para ti
Cinco años sin estar son muchos para mí
Un hijo vuelve por muy lejos que se vaya
Aquí los dientes eché
Aunque haya cantao en el falla ay.
Como esquivar los abrazos que de tu gente sentí
Si en Marbella nací
De Marbella y malagueño.
Quiero brindar con mi gente con mi estilo diferente
Quiero brindar con los tuyos, con tus genios y tus copleros.
Brisas de libertad, en estas tablas huele a libertad
Eterno aroma que el pueblo forjo en los cimientos de su carnaval.
Aquí nos tienes, atando al tiempo con esencias renovadas
Con esos nervios del que empieza una comparsa
Como te echaba de menos malagueña de mi alma.
Comparsa LOS CUCOS. Autor: Andrés Benítez García.
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...y gracias por permitirme adueñarme de estas letras.
David Delfín