Cuando llega diciembre son inevitables las ganas por escuchar un adelanto de las agrupaciones. A todos los que nos muerde el gusanillo antes de tiempo nos gusta dar un vistazo por aquí y por allí en busca de carnaval, y lo encontramos hasta debajo de las piedras. En el intento se conoce gente grande, grande de corazón de eso no cabe duda. Porque el carnaval tiene lo que tiene. Y no hay más que ponerse a comprobarlo.
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Ayer estuvimos en la barriada de Santa Cristina, lugar de ensayo de una de las comparsas más esperadas de nuestro concurso. Primer premio del 2005 en su modalidad con la Comparsa "Los Estudiantes" la comparsa de Jesús Gutierrez.
Me perdí por las curvas de una estrella antes de llegar al ensayo, y practicamente estaban terminando, rematando un popurrí que suena muy bonito. Así que cuando llegamos y me senté, pensé que habia merecido la pena perderse. Era un escenario que habia vivido seguramente momentos muy bellos de la vida de los que estaban allí, colmado de fotografías antiguas, y yo estaba junto a ellos, disfrutando de los preparativos de un carnaval que está a la vuelta de la esquina.
Un maestro del carnaval se nota cuando está presente. Respeto en sus indicaciones y seguridad en sus palabras, sabe lo que quiere y lo plasma en las gargantas de su gente. En una conversación antes de irnos nos adelantó que vendrán en una fragata cargada de coplas y de mucha fuerza, y esa fué la sensación que nos dieron mientras ensayaban. Grande la comparsa, grandes sus componentes, y grande la sencillez de la gente que vive junto a ellos el ensayo, aun recuerdo como se asomaban desde el bar para escucharlos... y no es para menos.
¡Gracias por acojernos en vuestra casa, mucha suerte para este año!
