Menos mal que mi Conchi me dijo "llevate el pañuelo blanco con tus iniciales que tu madre te puso en el ajuar cuando nos casamos que hoy es una sesión de comparsas de las buenas y tu te pones mu sensible" y yo le dije "Anda ya mujer que estas siempre igual" y que razón tenía porque fue una de esas sesiones de bellito de punta y corazón encogío.
Abrió telón el Guri y su grupo Ni tiempo que hace. Volvió a demostrar que está bastantes peldaños por encima de lo que propuso en otros carnavales. El tipo de panaderos lo explotan al máximo, lo estrujan, lo amasan, lo cocinan y dejan un bollito de pan con gusto divertido que gustó mucho de nuevo. Repaso en sus pasodobles graciosos a las murgas malagueñas a las que avisan que este año con Diego El Bollero en sus filas tendrá difícil conseguir algún premio aunque luego les dice que de ellos ha aprendido, después le dan un importante metido a la comparsa y a sus tópicos de los últimos años aunque apuntan que de ellos también aprendieron un poquito. En los cuplés hablan de una parienta de sí fácil. Volvió a gustar la duda que nos deja es que si le valdrá esa gran mejoría para volver a abrir el obrador también el viernes aunque me quedo con una reflexión esta murga demuestra que con trabajo y esfuerzo en unos años se puede pasar de estar lejos de los grandes a codearse por méritos propios aunque aún hay cosas que pulir como el uso desmedido y sin razón aparente de palabras mal sonantes especialmente en algunas partes de su repertorio no cantado.
Acto seguido apareció la comparsa marbellí La cuenta de Las Verdades que volvió a demostrar su gusto cantando y la musicalidad de sus coplas con ese tipo de contador de cuentos similar al Flautista de Hammelin, que tiene nombre de delantero holandés que el Madrid ficha lesionado. En sus pasodobles tocan dos temas de esos sensibleros para que haga uso de mi pañuelo tuneado por mi tía Puri, la soltera de la familia en sus años mozos, esa a la que nada más se le ha conocido un novio y que está más sola que Adán y Eva en la reunión de padre de alumnos. El primero a unos padres preocupados por el futuro laboral de sus hijos y el segundo se convierte en un mensaje a Pasión Vega, una de las pocas mujeres por las que dejaría a mi Conchi, y que camina entre Cádiz y Málaga y a la que pidén que no abandone a los carnavaleros malagueños. En sus cuplés referencia al no zapatazo al ex presidente de los Estados Unidos con nombre de Portillo, BUSH, y el segundo a Falete, todo un clásico. Volvió a gustar muy aplaudidos.
Después del popurrí y de la más que decente presentación del nuevo maestro de ceremonias al que dedicaré un día con más tiempo un comentario pormenorizado aunque ya digo que es mejor que una folclórica cantando y cantando entre actuación y actuación buscando una notoriedad que de otra manera no tendría con una honrosa excepción, la de la paleña Macarena. Llegaba el turno, entonces de otra murga, Pasando un Kilo, unos colombianos con acento cubano que llegaban a la Costa del Sol para pasar un kilo de todo y cantar sus coplillas, unas coplillas en las que adquirían acento malagueño dejando aparcado para la antesala a la siguiente copla su habla más caribeña que sudamericana. Pasodoble al Consumismo en el que aciertan al decir que las cosas que te hacen sentir más verdadero no se pueden comprar con dinero. En uno de los cuplés hacen una similitud entre Efren y el Nico, yo me quedo con el segundo claramente por mucho que mi niña esté empapelando el cuarto con fotos de ese veleño que dice ser futbolista y que seguro que no le ha dado una patá a una lata en toda su vida. Terminan su repertorio cantando Ojalá que lluevan cheques en blanco, ojalá que llueva panné, eso digo yo ojalá porque estamos más tiesos que el brazo der Hitler y mi mujer esta enharinando el pescado con el yeso que trae mi cuñao migué de la obra incrustao en el mono.
De nuevo a sacar el pañuelito dichoso porque aparece sobre el escenario la comparsa del Guti Febrerillo el Loco, que ya les he dicho que es el grupo de los Guti con arte, no el del Madrid que sólo tiene arte para dejarse el flequillo aunque eso sí pone las mismas posturitas jugando al balón que un comparsista cantando un pasodoble. Con su tipo, uno de los más vistosos del carnaval, de locos con camisa de fuerza cantan un pasodoble muy duro a la falta de apoyo de los medios, especialmente a Canal Sur que pone en pié al teatro. Buena comparsa, afinada al más genuino estilo de una agrupación que despierta los sentidos, levanta pasiones y gusta a casi todos. Estribillo en el que dicen morirse en febrero por un primero como todos los carnavaleros, menos yo que soy más de segundos, a mi los platos de cuchara como que no, prefiero una buena sartená de papas. Muy buena interpretación con un popurrí espectacular. A ver si lo dejan puesto para el miércoles y entre grupo y grupo en lugar del presentador nos dejan puesto el España - Inglaterra.
Llegó el descanso y con él el bocata. Mi compañero José Albarracín de Radiocarnaval.es me ha traído el bocata. En mi vida había probado una cosa igual, mortadela de verduras. Valiente porquería de invento, lo siento José lo tenía que contar. ¿Cómo ponerle a la mortadela verduras?, ¿qué pasa que así engorda menos?. Con lo buena que esta la mortadela Mina, seguro que vale mucho menos y aunque engorde más no veo, hijo mío no veo, la mortadela con zanahoria picada y acelgas partidas como un producto dietéticamente correcto, es más, como se enteren los de Colmenar de esa mezcla son capaces de poner un jamón de york con aloevera para ayudar al cutis, un salchichón con valeriana para el estrés o un jamón serrano con bifidus activo para ir al baño con regularidad, con lo bueno que está el lomo en manteca de la Butibamba.
Pues después de disfrutar de ese manjar, llegaba la murga del Chema. La terapia, la de la risa. Un grupo de gente con problemas mentales muy divertidos entre los que se encuentran algunas adiciones poco recomendables. Aun estoy tarareando eso de Poblemas tenemos tó, poblemas tenemos tó. Buen pasodoble a los besos que el Carnaval le quita de darle a sus parejas, y uno especialmente sensiblero, y en el que saque el pañuelo bordao por mi tía, a Paqui Prieto y a su gran trabajo con la murga de los niños. Popurrít divertido como final de una buena actuación de estos enfermos mentales que han pedido número para el viernes para la consulta en el Cervantes y que ahora mismo están en la lista de espera, veremos si se lo conceden o no.
Vuelta al pañuelo. Luego llega el momento de la comparsa de los gallegos. La Victoria, una comparsa que estuvo a punto de ser sancionada por llevar publicidad de una marca de cerveza pero que al final no lo fue porque Sergio Lanza a jurado y perjurado que no tiene nada que ver con esa firma por mucho que sea un asiduo al zumo de cebada fermentado malagueño y exquisito. Tardó en levantarse el telón más que Zapatero en aceptar que hay crisis, y es que por mi madre que parecía que estaban trayendo la Alcazaba piedra a piedra cruzando por la plaza de la Merced. Mereció la pena esperar para ver esta agrupación y oir sus coplas. Precioso pasodoble a la memoria histórica y a la falta de apoyo institucional hacia el carnaval , extensivo a la falta de carácter, por no decir otra cosa de la fundación. Cuplé al obispo nuevo, para que se vaya enterando de que van los carnavales por aquí y a la Sociedad General de Autores empeñada en cobrar hasta por la música de las misas de los funerales. Se rinde Málaga a esta agrupación que, como ya hizo la comparsa anterior, puso al público de pie.
Y para acabar una gran majada carnavalesca sobre el escenario, la que trae la murga de Marbella Este año la cosa huele mal. Las moscas cantan un pasodoble a la crueldad de las pateras, un dramón carnavalesco de dimensiones épicas. Me dio más pena que levantarme a las cinco de la mañana abrir la nevera y ver dos ratones jugando al escondite detrás de unos yogures del Prica los patios caducados. El otro pasodoble al Málaga y su afición. Por cierto un tema del que se habla poco en las coplillas de carnaval y que aún está por hacerse el pasodoble definitivo. Ya le he dicho a algún tío de peso entre los autores a ver si se anima un año y lo escribe sería un puntazo como el segundo gol de Salva el domingo en Martirícos. Así se cerró la sesión en la segunda semifinal, estamos en el ecuador de esta fase, los grupos se preparan para todo y todos se preparan para lo más grande. Salud.